Al menos tres son las excusas que los funcionarios de Régimen Penitenciario dan para denegar las visitas al gobernador Luis Fernando Camacho. Ninguna de ellas tiene respaldo legal.
Carlos Quisbert / Periodista
Régimen Penitenciario restringe, sin argumento legal, las visitas al gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, en el penal de San Pedro de Chonchocoro, donde mañana cumplirá siete meses en detención preventiva por el caso del supuesto «golpe de Estado» de 2109. Tres son la excusas que dan los funcionarios policíales.
“Por su condición de salud, él (Camacho) está aislado en un área restringida y no puede recibir visitas», fue el primer argumento que dio el gobernador del penal de Chonchocoro, mayor Marco Gonzáles a la periodista Maggy Talavera que se presentó hoy jueves, día de visitas, en el recinto carcelario, ubicado a 36 kilómetros de la ciudad de La Paz, entre los municipios de El Alto y Viacha.
La segunda excusa que Gonzáles le dio a Talavera fue que ella no figuraba en la lista de “las únicas personas que pueden visitar” al gobernador Camacho, elaborada -según Gonzales- en coordinación entre funcionarios de Régimen Penitenciario, encargados de Salud en el penal y los abogados de Camacho.
Pese a que se le explicó que la visita fue coordinada con varios días de anticipación y Camacho esperaba el ingreso de Talavera, Gonzáles llegó a insinuar que las restricciones eran impuestas por el mismo Gobernador cruceño, extremo que quedó desvirtuado por completo en el lugar por el abogado Efraín Suárez, asesor de Gestión de la Gobernación de Santa Cruz.
Y fue precisamente al abogado Suárez al que el My. Gonzáles dio la tercera excusa para impedir la visita de Talavera al gobernador Camacho. Gonzáles señaló a Suárez que la autorización para el ingreso de Talavera la debía dar Régimen Penitenciario, sin precisar un nombre.
Tres excusas contradictorias entre sí, que se repiten cada vez que se presentan amigos, familiares, militantes de Creemos y hasta funcionarios de la Gobernación para visitar a Camacho, pero siempre resultan impedidos de hacerlo. Y tres excusas que no tienen respaldo legal, como aclaró también en el momento el abogado Suárez.
No existe ninguna ley, norma, ni resolución expresa que restrinja el derecho de Camacho a recibir visitas en el penal, recordó Suárez, al traer a la memoria dos datos: uno dado por un fallo judicial que recomienda garantizar ese derecho; y otro dado por el director nacional de Régimen Penitenciario, Juan Carlos Limpias, que declaró ante los medios de comunicación que no existía restricción a las visitas del gobernador cruceño y que incluso los periodistas tenían acceso a él.
Sin embargo, el último argumento dado por el My. Gonzáles y que coincide con los recibidos antes por otros funcionarios policiales de Chonchocoro apuntan a qué las prohibiciones de vistas sí existen, son verbales y emitidas por autoridades superiores.
“Al final, las más de cinco horas de espera frustrada frente al penal de Chonchocoro han servido para evidenciar la vulneración de uno más entre tantos derechos del gobernador Camacho”, afirmó Talavera.
Durante la larga espera en el inhóspito paisaje que rodea a Chonchocoro, ubicado nada menos que a 4.000 metros sobre el nivel del mar, pudimos recoger algunos datos sobre el estado de salud física y mental del gobenador. Uno de los encargados de salud del penal dijo que está estable, su esposa Fátima Jordán señaló que está tranquilo y firme, y el abogado Suárez añadió que está lúcido y concentrado en sus tareas.