Carlos Alberto Paredes ya es un héroe para los vecinos de un barrio cruceño, que presenciaron un acto digno de elogio: se lanzó a un canal de drenaje, al tope de agua y fuerte corriente, para salvar a un niño que cayó al canal accidentalmente.
Carlos trabaja en Saguapac, estaba en la zona junto a un colega de trabajo y en un vehículo de la cooperativa. El niño es hijo de una vendedora de frutas en el mercado que funciona próximo al canal de desagüe.
Los videos compartidos por Mónica Leigue, y registrados por testigos que acompañaron el momento, muestran la angustia de la gente al ver que Carlos también desaparecía de vista, la alegría y alivio al verlo asomar de nuevo y ya con el niño en brazos, pero al mismo tiempo la desesperante confusión al no saber qué hacer luego con el rescatado.
Por supuesto que hay que destacar el arrojo de Carlos, un bálsamo para el alma y una dosis de alegría que nos devuelve la fe en el ser humano. Pero a la vez, es un accidente que nos plantea la urgencia de retomar acciones ciudadanas que obliguen a las autoridades y funcionarios públicos a dar ina solución de fondo al sistema de drenaje de Santa Cruz de la Sierra.
Por último, nos advierte por enésima vez que necesitamos más educación ciudadana, mejor conocimiento de protocolos y medidas de emergencia para auxiliar en situaciones de riesgo como la vista hoy, sin olvidar el cuidado permanente para con nuestros niños. Me angustié al ver al niño ya a salvo, fuera del canal, caminando, llorando y con dificultades para respirar.