La Unodc saludó que el Gobierno ponga énfasis en estas reservas y pidió visitar esas zonas en un año para verificar avances. Choré es la reserva donde más cocales hay y le sigue el Amboró. En Carrasco y el Tipnis los registros bajan.
El Deber
La extensión de coca ilegal sembrada en cuatro parques nacionales tuvo un crecimiento exponencial en los últimos tres años, según el más reciente reporte anual de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) que está a cargo de la eliminación de las plantaciones excedentarias que son desviadas al narcotráfico.
Si en 2020, se erradicaron 47 hectáreas de coca en esas reservas naturales del país, para el 2023 esa superficie se incrementó hasta las 1.081 hectáreas, es decir se multiplicó por 23, pese a los controles.
Según estos datos que fueron revelados el 11 de enero, en total se eliminaron 10.302 hectáreas de coca en 2023. De esta cantidad, 1.081 hectáreas fueron anuladas dentro de estos parques y reservas forestales. Esto significa que la décima parte de la coca ilegal se encontró dentro estas áreas protegidas.
El reporte señala que entre el 8 de noviembre y el 6 de diciembre de 2020, en plena pandemia del coronavirus, se erradicaron 14 hectáreas del Parque Nacional Carrasco; dos hectáreas en el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis); y 31 hectáreas de coca en la Reserva Forestal Choré, lo que hace el total de 47 hectáreas en estos parques.
Un año después, el 2021 la cantidad de coca erradicada en los parques se disparó a las 619 hectáreas y a estas reservas se sumó el Parque Nacional Amboró de Santa Cruz, donde se erradicaron 250 hectáreas de esa plantación.
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Para 2022, la FTC erradicó 1.588 hectáreas en Carrasco, Tipnis, Amboró y Choré, estos dos últimos pertenecientes al departamento de Santa Cruz. En el Amboró se erradicaron tres hectáreas, mientras que en Choré se eliminaron 1.396 hectáreas. En 2023, la erradicación certificada hasta el 18 de diciembre indica que, en esos cuatro parques, la erradicación bajó a 1.081 hectáreas. Esos datos dan cuenta de que en 2022 fue en la gestión que más coca se descubrió en los parques cruceños. Por tanto, en los tres últimos años el total de este producto erradicado alcanzó a 3.335 hectáreas.
“En el sobrevuelo que hemos realizado el 2021 nos hemos encontrado con bastantes sorpresas porque todas las áreas protegidas, parques nacionales estaban inundadas de cultivos de coca y de manera inmediata desplazamos más de ocho campamentos a las áreas protegidas y esa gestión se ha intervenido en todas esas zonas”, explicó el viceministro de Defensa Social, Jaime Mamani, sobre los cocales en los parques.
Habrá visita
El plan del Gobierno para erradicar la coca de los parques nacionales fue valorado por el representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc, por sus siglas en inglés), Troels Vester, quien dijo que en un año más visitarán los parques donde se erradicará la coca, esto para revisar los avances.
“Me gusta mucho lo que dijo el ministro (de Gobierno, Eduardo del Castillo), el compromiso del ministro es erradicar todo lo que es la hoja de coca en los parques nacionales, nosotros hemos tomado atención a eso, pues es parte del trabajo que nosotros realizamos es verificar, en un año iremos en conjunto con el Gobierno a visitar las áreas, ojalá al final del año podamos decir que se ha hecho”, dijo el representante internacional que realiza informes sobre el monitoreo de las plantaciones de coca para las Naciones Unidas.
Al igual que el Gobierno, Vester dijo que no es posible concebir que exista coca plantada en los parques. El viceministro Mamani, adelantó que para este año habrá la misma prioridad en la erradicación de coca en esas zonas.
Los orígenes
La existencia de coca en los parques nacionales no fue ajena a los informes internacionales de la Unodc, pues desde 2003 figura en todos sus reportes, aunque siempre eran dos áreas las que figuraban en esos reportes, el Carrasco de Cochabamba y el Tipnis que también está en esa zona.
Según estos reportes, siempre se encontró más de 1.000 hectáreas en estos terrenos, que dista abismalmente con el reporte de los tres últimos años. Lo que significa que mientras en Cochabamba decrecían los cultivos de coca, en Santa Cruz se sembraban estas plantas que son empleadas para la fabricación de cocaína.
En 2021, Carrasco reportó 118 hectáreas erradicadas, mientras que el Tipnis solo tuvo 69 hectáreas erradicadas, muy por debajo de lo que era en 2003. Para 2005 se sumó otro parque, pero en el departamento de La Paz, Madidi con 10 hectáreas. Para 2011 se sumó otra área protegida, el Parque Cotapata, que es colindante con la zona productora de Los Yungas, ese año se detectó 31 hectáreas de coca erradicada en ese parque.
Ese mismo año, en un reporte del Viceministerio de Defensa Social comunicó que la coca ilegal había llegado a los departamentos de Beni y Santa Cruz y la primera erradicación fue de 93,5 hectáreas en la Reserva Forestal de Choré.
Los vecinos
Los municipios cochabambinos de Chimoré y Villa Tunari son colindantes de la reserva forestal Choré, mientras que el parque nacional Carrasco es colindante con el parque nacional Amboró, de tal manera que los dos parques cruceños donde la coca creció tienen directa relación con las zonas productoras de coca.
Lo mismo sucede en La Paz, la zona productora de coca en La Asunta es colindante con el parque Cotapata, que es la reserva donde existe coca ilegal. La flamante presidenta de la Asociación Departamental de Productores de Coca (Adepcoca), Lizzet Torrez, confirmó la existencia de coca en ese parque.
“Lo que pasa es que en el gobierno del señor Evo Morales, llegaron hermanos de los departamentos de Oruro y Potosí y se asentaron fuera del cordón tradicional de producción de coca y ellos también plantaron coca y fueron reconocidos por el Gobierno de ese entonces”, describió.
En Santa Cruz hay una provincia y tres municipios donde se siembra y se erradica coca. Según el “monitoreo de cultivos de coca 2022” de la Unodc la provincia Ichilo se convirtió en zona cocalera porque tres municipios, Yapacaní, Buena Vista y San Carlos se encontró cultivos de coca.
En Yapacaní 180 hectáreas; en Buena Vista 11; y finalmente en San Carlos 10 que suman en total 201 hectáreas de coca. En Beni, la única provincia donde se encontró coca es Moxos, en el municipio de San Ignacio, donde se halló 240 hectáreas en 2022.