La presidenta Jeanine Añez ratificó a Alberto Morales Vargas en el cargo y dejó sin efecto la objeción presentada por la Asamblea Legislativa controlada por el MAS
La presidenta Jeanine Añez reposicionó hoy a Alberto Morales Vargas como nuevo Procurador General del Estado (PGE) y raticó la voluntad de su Gobierno de fortalecer la defensa de los intereses del Estado boliviano. La objeción presentada por la Asamblea Legislativa Plurinacional, controlada por el MAS, no duró ni una semana.
Morales fue posesionado el pasado 21 de septiembre, después de que su antecesor José María Cabrera fuera separado del cargo.
El 6 de octubre la mayoría masista en la Asamblea Legislativa aprobó una resolución objetando la designación con base a una sentencia del Tribunal Constitucional de 2016, la cual describe que Morales patrocinó un litigo contra el Estado. Según la norma no pueden asumir el cargo los abogados que hubieran sostenido un proceso contra el Estado en los últimos cinco años.
Sin embargo, el nuevo procurador aclaró que el argumento de la Asamblea era atemporal, porque la última actuación procesal que tuvo fue el 1 de septiembre de 2015 en una acción de amparo constitucional que no es un juicio contra el Estado, y su nombramiento fue el 17 de septiembre de 2020, por tanto, el supuesto impedimento legal está fuera de tiempo, dijo en una conferencia de prensa. La noticación de la Asamblea llegó el 8 de octubre y desde entonces asumió el cargo en forma interina Alejandro Roda Rojas.
El abogado Morales, muy conocido en el foro paceño por su amplia trayectoria en la defensa de los derechos humanos, volvió al cargo después de denunciar al candidato del MAS Luis Arce Catacora de tener movimientos irregulares en sus cuentas bancarias junto a esposa Lourdes Brígida Durán, quien era gerente del Banco Unión bajo tuición del mismo Arce, en base a un informe especial de la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF).